viernes, 19 de noviembre de 2010

Día Internacional del Hombre



Hace algunas horas me enteré de una noticia que me llamó la atención. "Millones de varones alrededor del mundo celebran hoy el día internacional del Hombre". Se supone que por pertenecer a este gremio masculino debió haberme, al menos congratulado un poco. Este día "tan especial" que festeja y tiene por objeto resaltar el rol de este género en la sociedad no hizo más que preguntarme ¿cual es el sentido de celebrar el ser hombre? (si es que lo hay).
De alguna u otra forma al calendario le faltan fechas para festejar o conmemorar el día de...: la nana, el amigo, la mamá, el papá, la secretaria, el niño (no sea mal pensado) el estudiante, el profesor, el de los enamorado, etc.. si hasta tenemos un día de la suegra. La mayoría de estos son motivados por un afán comercial, sin embargo hay algunos que responden a un genuino reconocimiento social por su aporte o importancia a la misma. Sin embargo en este mismo reconocimiento, en el hecho de tener que apartar un día para recordar alguna determinada cosa, se encuentra la insalvable paradoja del implicito olvido o poca importancia que ella representa. De alguna forma "el día de" es una forma desesperada de preservar la memoria de algo que está en vías de extinción o que en realidad no nos importa tanto más que para el discurso politicamente correcto. Es una especie de ofrenda floral a una lápida disfrazada de celebración, con la esperanza de alguna milagrosa resurrección del finado, pero sin ninguna certeza de ello, como ocurre con el día del Trabajo o el de la Mujer.
El apoyo de las Naciones Unidas a este día no es más que la contundente reconocimiento de que el genero masculino esta de capa caida. Sin caer en un machismo absurdo, lejos están los tiempos en que "el hombre manda en la casa", "el proveedor del hogar". Por siglos el rol del hombre fue ese, llevar el alimento, el "sustento" y la protección a su tribu, su clan o su familia.
Hoy se sabe que existe evidencia biológico de ello en el hecho en que por ejemplo, son los genes heredados por el padre en el gamemeto los que hacen que este crezca en el útero materno y curiosamente son los genes maternos los que gobiernan la inhibición del crecimiento del embrión y los procesos de término del embarazo ya que desde un punto de vista metabólico el embarazo es una seria amenaza a la supervivencia de la mujer. En definitiva el desarrollo de un feto es un delicado equilibrio entre los genes heredados de la madre que biologicamente tienden a expulsarlo lo antes posible (para que este feto no siga alimentandose de ella) y los genes paternos que sostienen su crecimiento para preservar su descendencia.
Sin embargo pasamos de estar por siglos en un extremo del péndulo al otro en no más de 50 años. La mujer tomo roles que culturalmente le habían estado prohibidos, y con tanto éxito que ha desplazado al hombre de ellos. La complementariedad que es anatómicamente evidente entre ambos sexos se mal entendido convirtiéndose en una guerra. Por otro lado la lucha por la reivindicación de movimientos homosexuales ha tenido su gran triunfo en la mayor aceptación, tolerancia e indiferencia por parte de la sociedad que ya en su gran mayoría no los ve como bichos raros y los respetan en cuanto personas y no conducta sexual.
Todo esto a reducido el espacio y la cantidad de hombres reconocidos tanto por el género como sexo masculino (que no es lo mismo) lo que nos lleva tristemente a celebrar simplemente el hecho de que aun quedamos algunos.
De ser los dueños, tiranos y señores de este mundo, después de ser creados por el mismísimo Dios en el Jardín del Edén para gobernar cuanta bestia se nos pusiera por delante, después de sacarnos una costilla y de ella el Señor hiciera una mujer para que el hombre no estuviese solo y poblara este mundo de hijos, estamos siendo reducidos y mirados como animales de zoológico, bichos raros, vestigios prehistoricos de una raza, rememoranzas de una especie que fue grande en su tiempo y como todo lo que sube hoy se encuentra en franca decadencia.
Darwin propuso la teoría de la evolución que entre otras cosas posibilita el paso natural del mono a hombre y así como van las cosas el próximo paso evolutivo debería ser del hombre a la maquina. Mientras tanto los hombres celebramos nuestro día... nuestros pocos días.